martes, 8 de julio de 2008

Alcalde Envuelto En Desórdenes, Silvestre Y Juancho Revolucionaron A Codazzi.


Codazzi se sobró para brindarle su apoyo en el concierto al cantante del momento, `El Original´ Silvestre Dangond, quien se presentó en un baile de vacaciones realizado en el estadio municipal, contando además como teloneros con la Orquesta de `kanko´ Suárez y una agrupación vallenata joven de la región que se llama Luis.

El evento que inició muy bien contó con el apoyo de la empresa `Bavaria´, entidad que en cabeza del gerente de promociones Eibar Camargo, gestionó la consecución del mismo generando un entusiasmo generalizado y una expectativa en la gente que se sentía muy emocionada por tener de vuelta al cantante en su tierra.

Sin embargo, como eventualmente sucede en este tipo eventos, se presentó una falla. La determinó la poca presencia de Fuerza Pública, previsible para contener a la muchedumbre frente a una contingencia; sin embargo se hizo evidente la falta de seguridad ya que dentro del estadio no había policías, y muchos se colaron para no pagar la entrada.

Ahí inició casi la hecatombe. Los ánimos caldeados subían con el paso de los minutos y las horas; tanto así que todos querían subir a la tarima para tener de cerca de el ídolo Silvestre Dangond y su acordeonero `Juancho´ De la Espriella; como era de esperarse los encargados del manejo de logística en tarima por parte de `Bavaria´, se dieron a la lógica tarea de tratar de frenar a la gente como era su trabajo.

Eso enardeció aún más a los asistentes que intentaban por todos los medios llegar hasta los artistas; uno de éstos el caso más reprochable, el del alcalde Jesús Suárez Moscote, quien también quería subir a tarima y al no concedérsele el deseo, la emprendieron a golpes él y uno de sus escoltas contra uno de los muchachos de la logística.

Ese mal ejemplo, llevó a que Éiber Camargo gerente de promociones de `Bavaria´ decidiera hacerse a un lado, abandonando la tarima al tiempo que recriminaban el hecho, “el Alcalde y uno de los guardaespaldas, golpearon a uno de los muchachos de `Bavaria´ porque no lo dejaban pasar y por eso decidimos dejar sola la tarima”.

El tema de seguridad trascendió tanto que en un momento determinado había tanto peso sobre la tarima que fue necesario un llamado de conciencia para evitar funestos accidentes que ya se han observado en situaciones similares. Silvestre fue uno de los que dijo que si no se bajaban, la música se callaba. No obstante el civismo del 90 por ciento de los codacenses salió a flote y convenciéndose los unos a los otros, la multitud que invadía la tarima, abandonó el templete, continuando con la inmejorable presentación de Silvestre y `Juancho´ y sus muchachos que deleitaron a Codazzi hasta entrada la madrugada con los temas incluidos en su `CD´ `El Original´.

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